26 de marzo de 2007

CUANDO DECIDIMOS ENFERMAR...

Uno de los principios básicos de la SALUD, es que nuestro físico está unido a nuestros estados emocionales, mentales y espirituales. Todos los niveles están interrelacionados.
Un estado de «in-disposición» en el cuerpo refleja un conflicto, tensión, ansiedad o un desequilibrio en la armonía de otros niveles de nuestro ser.
Entre la mente y el cuerpo, se da una constante comunicación.
El cuerpo percibe el físico y envía mensajes a la mente acerca de él. La mente interpreta las percepciones, según su propia experiencia individual del pasado y con su sistema de creencias, y le indica al cuerpo que reaccione. Si el sistema "cree" que la solución es enfermar en una determinada situación, el cuerpo manifestará síntomas de enfermedad. Y enfermará de verdad.

Por lo tanto, cuando sentimos alguna indisposición física, es útil y oportuno analizar nuestras emociones, pensamientos y actitudes, para ver qué es lo que estamos deseando, qué situación que estamos viviendo, puede estar rompiendo el equilibrio y queriendo manifestarse.
También podemos -por nuestra cuenta o buscando ayuda terapéutica -comprender y poner en práctica las acciones que restablezcan la natural armonía en nuestro ser.
Es interesante "sintonizar" con nuestro proceso interno y aprender a escucharlo.

Así pues, todo el proceso está relacionado con nuestras más profundas ideas, sobre nosotros, la vida, y sobre la naturaleza de la salud y de la enfermedad.